La Regla Kobe para tu empresa: 2–5 jugadas al día y en 10 años les pasarás por encima

5 min read

UNK UNK UNK poster on wall
UNK UNK UNK poster on wall

Kobe Bryant tenía un juego: el baloncesto.


Podía haber sido “uno más” con talento. Pero eligió otra cosa: entrenar antes que los demás.


Se levantaba cuando el resto dormía, metía una sesión extra y renunciaba a lo que no sumaba: noches largas, televisión, garitos, quejas, tumbings varios. Dormir, entrenar, repetir. Años.

Diez años después, el mejor joven de EE. UU.
Dos décadas más tarde, leyenda.


Murió siendo eso: un tipo que dedicó la vida a perfeccionar su juego.

Ahora te pregunto a ti, empresario: ¿cuál es tu juego… y cómo te entrenas?

Porque la fórmula para sobresalir es tan sencilla como implacable:

Si cada día haces entre 2 y 5 cosas más que tu competencia, en 10 años vivirás en un mundo que ellos solo podrán admirar desde el móvil.
Si ellos hacen X, tú haces 2X o 3X. Punto.

No es mística. No es talento caído del cielo. Es método, esfuerzo y constancia.
Y sí, el talento está sobrevalorado; lo que separa empresas normales de empresas sólidas es la preparación diaria.

El problema no es falta de talento, es falta de juego

Muchos empresarios que me escriben están agotados. No porque les falte cabeza o ganas, sino porque no han estructurado su juego.
Viven en modo bombero: apagan incendios.
Y cuando no arde nada… lo provocan sin querer, por falta de foco.

Tienes un negocio que chuta. Bien.
Lo siguiente para que chute extraordinariamente bien no es un milagro más grande, sino comprometer e ilusionar a tu equipo y entrenar cada día lo que importa.


Eso es juego.
Lo otro es supervivencia.

Elegir tu juego (y elegir uno)

Kobe no jugaba a baloncesto, golf y tiro con arco a la vez. Tú tampoco.
Define tu juego principal como empresario. No diez. Uno.

  • Si diriges una empresa B2B, tu juego puede ser construir un motor comercial predecible.

  • Si eres retail, quizá sea rotación rentable y repetición del cliente.

  • Si fabricas, tu juego puede ser margen + plazos + calidad estable.

  • Si eres servicios, capacidad, tickets medios y satisfacción.

Quedarte con uno no excluye lo demás, pero ordena prioridades.
Cuando todo es importante, nada lo es.

¿Cómo se entrena un empresario? La regla 2-5X

Entrenar no es “estar ocupado”. Entrenar es repetir lo correcto con disciplina.
Aplica la regla 2-5X: dos a cinco acciones diarias, pequeñas, medibles y repetibles, que te ponen por delante.

Te dejo un menú (elige según tu juego). Nada de fuegos artificiales; chicha:

Finanzas (para que el dinero mande… y no tú a ciegas)

  1. Revisar 15 minutos márgenes y cash de la semana.

  2. Detectar un coste que se pueda optimizar sin dañar al cliente.

  3. Llamar a un cliente clave para adelantar cobro o revisar condiciones.

  4. Actualizar previsiones de tesorería (no la cuenta de la vieja).

Equipo (tu Equipo A)

  1. Un 1-a-1 de 20 minutos con un mando: reconocer, desbloquear, acordar siguiente paso.

  2. Delegar una decisión concreta con autoridad real (no “me lo traes para firmar”).

  3. Dar feedback inmediato por una conducta que quieres multiplicar.

Marketing y ventas (la caja)

  1. Hacer o revisar dos contactos de prospección de calidad (no spam).

  2. Mejorar una pieza de la oferta: caso de éxito, testimonios, precio, bonus.

  3. Llamar a un cliente perdido para entender por qué se fue y qué haría que volviese.

Operaciones/entrega (que lo prometido sea deuda)

  1. Eliminar una fricción del proceso (un clic menos, un paso menos, un error menos).

  2. Medir un indicador de calidad y comunicarlo al equipo.

Estrategia (rumbo)

  1. 30 minutos de trabajo profundo: decidir qué no harás esta semana.

  2. Documentar una decisión en dos líneas: por qué, para qué, cómo se mide.

No las hagas todas. Elige 2-5 y repítelas.
Cada día.
Durante meses.

La mejora compuesta es un bicho silencioso: al principio parece que no pasa nada, pero un año después eres otro club.

El juego invisible: tu conversación interior

Kobe construyó un físico brutal, sí, pero también una cabeza blindada.
Como empresario juegas dos partidos: el de fuera (números, equipo, clientes) y el de dentro (miedo, dudas, comparaciones).
Tu diálogo interno sabotea o impulsa el juego.

Cambia estas frases:

  • “No estoy preparado” → “Me preparo todos los días.”

  • “Mi competencia lo hace mejor” → “Hoy haré 2-5X más que ellos.”

  • “No llego a todo” → “Voy a elegir mi juego y entrenarlo.”

Esto no es autoayuda barata. Es diseño mental para sostener la ejecución.

Un plan de entrenamiento de 90 días (muy concreto)

  1. Define tu juego en una frase: “Mi juego es X”. Escríbelo. Ponlo en grande.

  2. Elige 3 métricas de mando (ej.: margen, repetición, tiempo de entrega).

  3. Diseña tus 2-5 acciones diarias (las de arriba, adaptadas).

  4. Bloquea 90 minutos al día de trabajo profundo sin interrupciones. Calendario, no deseos.

  5. Implanta 1-a-1 semanales de 20 min con tus mandos. Misma estructura: reconocer → bloquear → siguiente paso.

  6. Crea un marcador visible: una pizarra o dashboard que todo el mundo vea.

  7. Revisa cada viernes: qué funcionó, qué no, qué cambias el lunes. Cero culpa; ajuste fino.

  8. Quema lo accesorio: elimina o delega lo que no pertenece a tu juego. Sí, duele. Es libertad.

Con esto no necesitas Maldivas, frutita bio ni promesas motivacionales.
Necesitas método.

“Vale, Chema, pero yo no soy Kobe”

Lo sé.
Kobe tenía un entrenador, fisios, nutrición, vídeo análisis… equipo.
Por eso avanzaba el triple.

Como empresario, solo también puedes mejorar, pero acompañado lo harás más rápido, más seguro y con menos hostias.


Ese es el papel de un mentor: un espejo honesto, un método probado y alguien que ya se comió los errores que tú estás a punto de morder.

Cuidado con el vendehúmos que se presenta como “mentor de empresarios” y lo más parecido a una empresa que gestionó es la cola del Mercadona.
Busca experiencia real, método, casos y conversaciones sin maquillaje.

Preguntas que te dejan sin excusas

  • ¿Cuál es tu juego? Dilo en voz alta.

  • ¿Cuáles son las 2-5 acciones diarias que vas a repetir desde mañana?

  • ¿Qué tres métricas vas a mirar sí o sí cada semana?

  • ¿A quién vas a pedirle ayuda para no soltar el ritmo?

Si no respondes, seguirás acumulando tareas y perdiendo partidos por la mínima.
Si respondes y ejecutas, empezarás a ganar por inercia.

Cierre (con la brutal honestidad de Kobe)

No hace falta que seas un genio.
Hace falta que elijas tu juego, entrenes mejor que los demás y no abandones.

Hoy puedes empezar con algo tan ridículo como dos llamadas de valor y un 1-a-1.
Mañana, repites.
Y pasado, repites otra vez.
En un año, te sorprendes.
En diez, vives en otro planeta.


QUIERO ENTRENAR COMO UN GANADOR — Hablemos de tu juego y tu plan de 90 días

Haz que tu empresa funcione sin ti.
Y que vuelvas a disfrutar el partido.

📬 UN CORREO AL DÍA

Desde 2020 escribo cada día a empresarios como tú.

Correos entretenidos, breves, claros y sin tonterías.

Lo que necesitas para pensar mejor, tomar decisiones y dirigir con tranquilidad.

👉 Déjame tu email y empieza a recibirlos hoy.

Apuntarse es gratis. Darse de baja también.